Dios Todopoderoso dice: “Los pecados del hombre fueron perdonados, y esto es gracias a la obra de crucifixión de Dios, pero el hombre siguió viviendo en su viejo carácter satánico corrupto del pasado”.
Dios Todopoderoso dice: “Desde la obra de Jehová a la de Jesús, y desde la de Jesús a la de la etapa actual, las tres etapas cubren la totalidad de la amplitud de la gestión de Dios, y todas ellas son la obra de un mismo Espíritu”.
Ahora, repasemos el Libro de Job y echemos un vistazo detallado a las formas en que Job manifestó su temor a Dios, y esto nos ayudará a obtener un nuevo entendimiento y entrada en la verdad de temer a Dios.
Dios Todopoderoso dice: “Solo cuando uno acepta la soberanía del Creador, se somete a Sus orquestaciones y arreglos, y busca la verdadera vida humana, empezará a librarse gradualmente de toda angustia y sufrimiento, y a deshacerse de todo el vacío de la vida”.
Las palabras de Dios Todopoderoso lo aclaran: que acabemos entrando o no en el reino de los cielos, no depende de cuánto trabajemos ni de cuánto hayamos sufrido.
“Porque como el relámpago al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro extremo del cielo, así será el Hijo del Hombre en su día. Pero primero es necesario que Él padezca mucho y sea rechazado por esta generación” (Lucas 17:24-25).
Dios Todopoderoso dice: “Las declaraciones y la obra de Jesús en esa época no estaban sujetas a la doctrina, y Él no llevó a cabo Su obra de acuerdo a la obra de la ley del Antiguo Testamento”.
Dios Todopoderoso dice: “Todos los que pueden seguir la luz presente del Espíritu Santo son benditos. Las personas de épocas pasadas también siguieron las pisadas de Dios, pero no pudieron continuar hasta hoy; esta es la bendición de las personas de los últimos días”.
Dios Todopoderoso dice: “Sólo llegando a conocer a Dios y satisfacerlo sobre el fundamento de comer y beber Sus palabras, uno puede establecer poco a poco una relación normal con Él”.
Dios Todopoderoso dice: “Porque, en la Era de la Gracia, los demonios salían del hombre con la imposición de manos y la oración, pero las actitudes corruptas del hombre ".