Debido a que la epidemia se vuelva cada vez más grave y las fábricas están cerradas, muchas personas han estado desempleados y enfrentándose con la dificultad de la falta del recurso de la economía cayendo en un aprieto. Ante esta situación, ¿qué debemos hacer? Y ¿Dónde está la salida?
La Palabra de Dios dice: “La humanidad, que abandonó el suministro de vida del Todopoderoso, no sabe por qué existe y, sin embargo, teme a la muerte. Están sin la ayuda o apoyo, pero siguen renuentes a cerrar los ojos; y se arman de valor para alargar una existencia innoble en este mundo, sacos de carne sin tener ni idea de sus propias almas. Tú vives así, sin esperanza, como hacen otros, sin ningún objetivo. Sólo existe el Santo de la leyenda que vendrá a salvar a los que gimen por el sufrimiento y anhelan desesperadamente Su llegada. Hasta ahora, las personas que no tienen conciencia no pueden realizar esta creencia. No obstante, ellas siguen anhelando que así sea. El Todopoderoso tiene misericordia de estas personas que sufren profundamente. Al mismo tiempo, está harto de estas personas que no tienen conciencia, porque tiene que esperar demasiado para obtener la respuesta por parte de los humanos. Él desea buscar, buscar tu corazón y tu espíritu. Él quiere traerte alimento y agua y despertarte, de modo que ya no tengas sed ni hambre. Cuando estés cansado y cuando comiences a sentir la desolación de este mundo, no te quedes perplejo, no llores. Dios Todopoderoso, el Vigilante, acogerá tu llegada en cualquier momento. Está vigilando junto a ti, esperando que des marcha atrás. Está esperando el día en el que recuperes la memoria de repente: que te hagas consciente del hecho de que viniste de Dios, que, de algún modo y en algún lugar, te perdiste, cayendo inconsciente a un lado del camino y que luego, sin darte cuenta, tuviste un padre. Además, te diste cuenta de que el Todopoderoso ha estado vigilando en ese lugar, esperando todo el tiempo tu regreso. Él anhela amargamente, esperando una respuesta sin tener una. Su vigilancia no tiene precio y lo que vigila es el corazón y el espíritu de los seres humanos. Tal vez esta vigilancia sea indefinida y, quizá, ya esté llegando a su fin. Pero tú debes saber exactamente en dónde se encuentran tu corazón y tu espíritu en estos momentos”.
Las palabras de Dios nos dan confianza y esperanza, Él ha estado esperando que volvamos ante Él para confiar y mirar a Él, seguir Sus pasos y obtener Su guía. Recordando lo que se registra en la Biblia, había una hambruna en Canaán, y no había comida para comer en todas partes. Dios había enviado a José a ser un primer ministro de Egipto por adelantado para que los israelitas pasaran 7 años de hambre. Otro ejemplo, cuando los israelitas cruzaron el Mar Rojo y salieron del desierto, se enfrentaron a la escasez de agua y la comida y a muchos peligros, pero Dios estaba con ellos, les dio comida del cielo y hizo que la roca saliera agua; y también, el milagro de alimentar a 5,000 personas con cinco panes y dos peces que hizo el Señor Jesús, etc. El Dios en el que creemos es un Dios todopoderoso, Él puede hacer las cosas que existen como si no existieran, y crear cosas de la nada. Solo Él es nuestro respaldo y nuestro único apoyo. Y ahora lo más importante es encontrar los pasos de Dios para presentarnos ante Él para convertirnos en una persona que concuerda con Su voluntad, sólo siendo así, podremos obtener Su cuidado y protección.
Los frecuentes desastres y naciones turbulentas son señales de los últimos tiempos y nos permiten saber qué ha llegado el día del Señor. Entonces, en este momento crítico de recibimiento al Señor, ¿cómo debemos estar alertas y preparados para recibir a Él? Haga clic en medios de contacto abajo para hablar y comunicarse con nosotros, y recibir al Señor lo antes posible.