Orar de verdad es hablar con el corazón a Dios.
Se basa en la voluntad y la palabra de Dios.
Orar de verdad es sentirse,
oh, tan cerca de Dios como si Él estuviera frente a ti.
Sosiega así tu corazón ante Dios:
Ignora lo externo, guarda silencio ante Dios
y órale con todo el corazón.
Con tu corazón sosegado ante Dios,
come, bebe y disfruta de Sus palabras,
contempla el amor de Dios
y reflexiona sobre Su obra con el corazón.
I
No tienes la introspección de Pablo.
Necesitas siempre el castigo
y el juicio para despertarte.
El castigo es lo mejor para tu vida.
Y cuando es necesario,
tienes que sufrir el castigo
de la llegada de los hechos
para que puedas entregarte.
Sin ser castigado y maldecido,
no agacharías la cabeza,
no estarías dispuesto a entregarte.
Ⅰ
No importa lo que obtengas en el futuro,
hoy verás que la obra de Dios en ti es amor.
Desde el tiempo de los hacedores de servicio hasta hoy,
la gente puede ver claramente
lo magnífica que es la obra de Dios.
La mente humana no puede entender
las formas en las que Dios obra.
El hombre puede ver cuán pequeña es su propia estatura
y cuán grande es su desobediencia.
Escuchar música cristiana | En cada era Dios hace nueva obra
I
La sabiduría de Dios nunca cambia,
la maravilla de Dios nunca cambia,
la justicia de Dios nunca cambia,
la majestad de Dios nunca cambia,
la sustancia de Dios nunca cambia,
y lo que Él tiene y lo que Él es nunca cambiará.
Y Su obra está avanzando y profundizando;
Dios es siempre nuevo y nunca viejo.
Nuevo nombre, nuevas obras en cada era;
una nueva voluntad y carácter.
La humanidad y Dios comparten la dicha de la unión
I
Dios ha comenzado Su obra por todo el universo.
La gente se despierta y se mueve alrededor de Su obra.
Cuando Dios “viaja” dentro de ellos,
ellos se libran de Satanás.
Para que tú puedas ser usado por Dios,
no sólo debes tener ese deseo,
sino que Sus palabras te guíen y refinen,
y que Él te trate y te ilumine.
Agrégale tus observaciones, ideas,
reflexiones y conclusiones,
lo que absorbes, eliminas,
práctica todo esto sobre esos cimientos.
Estos son los senderos
para que entres en la realidad.
Todos ellos son indispensables.