¿Sabes cuál es el mayor dolor interior de Cristo?
El Señor Jesús dijo: “Las zorras tienen madrigueras y las aves del cielo nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza” (Mateo 8:20). Pienso que el mayor dolor interior de Cristo fue se encarnó viviendo entre los hombre, siendo condenado, perseguido y blasfemado por ellos, y que no tenía un lugar de albergue donde había sido creado por Él mismo, y acabó siendo clavado en la cruz por ellos y no tuvo otra opción más que se convirtió en una semejanza pecaminosa cada vez que leo estas palabras del Señor Jesús. Y no entendí que aún hay un dolor mucho más grande que eso hasta que no leí un pasaje de la Palabra de Dios más tarde.
Dios dice: “Algunas personas simpatizan a menudo con la difícil situación de Cristo porque hay un versículo en la Biblia que dice: “Los zorros tienen guaridas y las aves tienen sus nidos; pero el Hijo del Hombre no tiene donde apoyar Su cabeza”. Cuando las personas oyen esto, se lo toman a pecho y creen que es el mayor sufrimiento que Dios resiste, y también es el mayor sufrimiento que Cristo resiste. Ahora, mirándolo desde la perspectiva de los hechos, ¿es ese el caso? Dios no cree que estas dificultades sean sufrimiento. Nunca ha clamado contra la injusticia por las dificultades de la carne ni ha hecho que los seres humanos le devuelvan nada ni lo recompensen. Sin embargo, cuando ve el todo de la humanidad, las vidas corruptas y la maldad de los seres humanos corruptos, cuando ve que la humanidad está entre las garras de Satanás, apresada por él sin poder escapar, esas personas que viven en pecado no saben cuál es la verdad: Él no soporta todos estos pecados. Su aborrecimiento de los hombres se incrementa día a día, pero Él tiene que aguantar todo esto. Este es el gran sufrimiento de Dios. Él no puede expresar plenamente la voz de Su corazón, Su felicidad, Su ira, Su tristeza o Su placer entre Sus seguidores, y nadie entre ellos puede entender verdaderamente Su sufrimiento. Nadie intenta siquiera entender o consolar Su corazón, que soporta este padecimiento día tras día, año tras año, una y otra vez. ¿Qué veis en todo esto? Dios no exige nada a los humanos a cambio de lo que Él ha dado, sino que por Su esencia no puede tolerar en absoluto la maldad, la corrupción y el pecado de la humanidad. Él siente un aborrecimiento y un odio extremos, que llevan a Su corazón y a Su carne a soportar un sufrimiento inacabable. ¿Podríais ver todo esto? Lo más probable es que ninguno de vosotros pudiera, porque no hay entre vosotros quien entienda de verdad a Dios”.De “La Palabra manifestada en carne”
La Palabra de Dios nos hace entender Sus pensamientos. La persecución, la calumnia y la falta de albergue no fueron causas que hicieron a Dios sentir dolor al obrar encarnando en la tierra, sino que Él vió a la humanidad vivir bajo el dominio de Satanás, y que todos sus pensamientos, sus acciones, sus métodos y principios de existencias fueron controlados por Satanás, todos estos fueron contra de la verdad, de Dios. Sin embargo, aunque nosotros los seres humanos hemos sido corrompidos profundamente por Satanás, Dios nunca nos ha abandonado y considerándonos como Sus objetos de la salvación.
Scripture quotations taken from LBLA Copyright by The Lockman Foundation.
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